En un mundo cada vez más digitalizado, el área de Talento Humano se enfrenta a un desafío fascinante: humanizar la tecnología sin deshumanizar el trabajo. Lejos de ser una paradoja, esta tendencia marca el camino hacia un modelo de gestión más empático, estratégico y centrado en las personas.
¿Qué está cambiando?
¿Qué podemos hacer desde Talento Humano?